Según MiningWeekly, el martes, el ministro de Electricidad y Energía de Sudáfrica, Kgosientsho Ramokgopa, enfatizó en su discurso inaugural el primer día de Enlit Africa 2025, una exposición internacional sobre generación, transmisión, distribución de energía, energías renovables y servicios públicos celebrada en el Centro Internacional de Convenciones de Ciudad del Cabo, que los países africanos, incluido Sudáfrica, deben mejorar su capacidad para aprovechar plenamente su potencial de desarrollo.
Pidió que se permitiera al continente africano alcanzar sus objetivos de desarrollo. África debe poder liberar su potencial. En cuanto a los recursos africanos, deben desarrollarse de manera mutuamente beneficiosa y compartida. De hecho, África tiene recursos y el continente ya es un importante productor de minerales críticos. Sin embargo, los países desarrollados tienen el capital.
El desafío es que, para los inversores internacionales, África es percibida como un lugar de riesgo para invertir. Por lo tanto, la falta de capital significa que sus recursos permanecen sin explotar. Por ejemplo, aunque África posee el 60 % del potencial de recursos de energía solar del mundo, su generación de energía solar representa solo el 1 % del total mundial.
"Es crucial que abordemos este problema", dijo.
Señaló que un tema importante en los foros multilaterales es el "trilema energético". En primer lugar, cada país necesita garantizar la seguridad energética. En segundo lugar, es necesario garantizar el acceso a la energía, que abarca dos aspectos: la asequibilidad y la disponibilidad (600 millones de africanos aún carecen de acceso a la electricidad). En tercer lugar, está la sostenibilidad ambiental.
Ramokgopa cree que la sostenibilidad ambiental ha recibido demasiada atención en los foros internacionales. Argumenta que, sin abordar al mismo tiempo la cuestión de la disponibilidad de energía, este aspecto del trilema energético perderá credibilidad.
"Los países africanos necesitan lograr su propia transición energética con características africanas", dijo. "No hay un único modelo de transición".
También observó que el consumo de energía de África es solo una sexta parte del promedio mundial. Sin embargo, para 2040, se espera que la demanda de electricidad del continente se triplique.
Para Sudáfrica, si el país quiere lograr su desarrollo esperado, debe haber un diálogo centrado en sus opciones energéticas disponibles. No se trata de oponer las energías renovables a otras formas de energía.
"Se necesitan todas las fuentes de energía", dijo.
