El lunes, hora del este, Bank of America emitió un informe en el que advertía que los bancos centrales de todo el mundo han estado vendiendo bonos del Tesoro de Estados Unidos desde marzo de este año, lo que indica que están reduciendo sus inversiones en activos en dólares estadounidenses y buscando inversiones en otros activos.
Bank of America advirtió que esta tendencia de venta es inusual en medio de la actual debilidad del dólar estadounidense. También expresaron su preocupación por la demanda futura de bonos del Tesoro de Estados Unidos por parte de los bancos centrales extranjeros.
Venta "inusual"
El lunes, hora del este, un equipo liderado por Meghan Swiber, estratega de Bank of America, publicó un informe titulado "Aparecen grietas en la demanda extranjera de bonos del Tesoro de Estados Unidos".
Los datos del informe mostraron que, en la semana que finalizó el 11 de junio, los bancos centrales mundiales y otras entidades oficiales redujeron sus tenencias promedio de bonos del Tesoro de Estados Unidos en el Banco de la Reserva Federal de Nueva York en 17.000 millones de dólares, con una reducción acumulada de 48.000 millones de dólares desde finales de marzo. Además, las tenencias extranjeras en la facilidad de pactos de recompra inversa de la Reserva Federal de Estados Unidos han disminuido en unos 15.000 millones de dólares desde finales de marzo.
Los analistas escribieron en el informe que este comportamiento de venta es "inusual" porque los bancos centrales suelen comprar bonos del Tesoro de Estados Unidos cuando el dólar estadounidense está débil, pero sus acciones este año se han apartado de este patrón en medio de la debilidad del dólar.
Las perspectivas de demanda de bonos del Tesoro de Estados Unidos son preocupantes
En los últimos meses, el interés del mercado internacional en los bonos del Tesoro de Estados Unidos ha llamado cada vez más la atención.
Desde que el presidente estadounidense Trump asumió el cargo, sus caóticas políticas comerciales y fiscales han perturbado los mercados financieros, lo que ha llevado a los compradores extranjeros a tender a evitar los activos estadounidenses, la llamada operación de "vender a Estados Unidos".
En lo que va de año, el índice del dólar estadounidense ha caído un 9,48 %, alcanzando un punto bajo en los últimos tres años, en parte debido a las preocupaciones de que los aranceles afecten las perspectivas económicas de Estados Unidos.
"Este flujo de capital puede reflejar un cambio en las tenencias del sector oficial del dólar estadounidense hacia la diversificación", escribieron los estrategas, y añadieron que "siguen preocupados por las perspectivas de demanda extranjera de bonos del Tesoro de Estados Unidos".
Los inversores extranjeros han sido una fuerza importante en la compra de bonos del Tesoro de Estados Unidos. De hecho, según los datos de flujo de capital de la Reserva Federal de Estados Unidos, en el primer trimestre de este año, casi toda la demanda de bonos del Tesoro de Estados Unidos en el mercado provino de agentes de bolsa e inversores extranjeros.
Swiber escribió que esto destaca "una situación preocupante". Dijo: "La trayectoria futura de la demanda extranjera es preocupante, especialmente teniendo en cuenta que un número creciente de inversores globales desea reducir sus tenencias de activos estadounidenses o aumentar sus ratios de cobertura".
Los estrategas también señalaron que la participación de los inversores extranjeros en las subastas recientes de bonos del Tesoro a 2 y 20 años ha "continuado debilitándose".



