El jueves, hora local, el Banco Nacional Suizo (BNS) anunció una reducción de 25 puntos básicos en su tasa de interés de política monetaria hasta el 0 %, en respuesta a la disminución de la inflación, la presión alcista sobre el franco suizo y las incertidumbres económicas derivadas de las políticas comerciales estadounidenses.
Esta es la sexta reducción de tipos de interés del BNS desde que inició un ciclo de flexibilización en marzo de 2024, lo que ha llevado a Suiza al borde de una política de tipos de interés negativos.

En su última declaración, el BNS dijo: "Las presiones inflacionarias han disminuido en comparación con el trimestre anterior. Con la flexibilización de la política monetaria de hoy, el BNS está respondiendo a estas menores presiones inflacionarias".
"El BNS seguirá vigilando de cerca la situación y ajustará su política monetaria según sea necesario para garantizar que la inflación se mantenga dentro de un rango compatible con la estabilidad de precios a medio plazo", añadió el banco.
Antes de esta reducción de tipos, la tasa de inflación anual de Suiza se volvió negativa (-0,1 %) en mayo por primera vez en cuatro años, cayendo fuera del rango objetivo del BNS de 0-2 %. Esto significa que, mientras que la mayoría de los países están lidiando con la inflación, Suiza se enfrenta a la deflación.
Sin embargo, la deflación no es infrecuente en Suiza, ya que se ha producido tanto en la década de 2010 como en la de 2020, siendo la fortaleza del franco suizo un factor importante que impulsa esta tendencia.
En su escenario base, el BNS espera que el crecimiento económico mundial se ralentice en los próximos trimestres, mientras que la inflación en Estados Unidos aumentará y las presiones inflacionarias en Europa disminuirán aún más.
El BNS enfatizó que las perspectivas económicas mundiales siguen siendo muy inciertas, y que es posible que nuevos aumentos de las barreras comerciales provoquen una mayor ralentización del crecimiento económico mundial, aunque no se puede descartar que el apoyo de la política fiscal al crecimiento económico pueda superar las expectativas.
Mientras el BNS reduce los tipos de interés, los bancos centrales de todo el mundo están ocupados: el banco central de Noruega anunció inesperadamente su primera reducción de tipos en cinco años y el Banco de Inglaterra tomará una decisión sobre sus tipos de interés más tarde.
El economista de UBS, Alessandro Bee, comentó: "La reducción de tipos del BNS se debe al fortalecimiento continuo del franco suizo, y las perspectivas económicas de Suiza se han vuelto más frágiles tras los aranceles del 'Día de la Liberación'. El BNS espera evitar una mayor apreciación del franco suizo, lo que podría ayudar a los exportadores suizos y también evitar nuevas caídas de la inflación".
Cabe destacar que el franco suizo se ha apreciado alrededor de un 11% frente al dólar estadounidense en lo que va de año, ya que los inversores buscan refugios seguros. Esto ha hecho que los bienes importados sean más baratos, lo que ha contribuido a la disminución de la inflación.
Charlotte de Montpellier, economista senior de ING, afirmó: "Como moneda refugio, el franco suizo tiende a apreciarse cuando los mercados globales están bajo presión, lo que reduce sistemáticamente los precios de los productos importados". Suiza es una economía pequeña y abierta, y las importaciones representan una parte importante de la inflación del IPC".
En medio de la gran incertidumbre económica mundial, el franco suizo ha seguido fortaleciéndose en los últimos meses, y el mercado generalmente espera que continúe haciéndolo, lo que indica desafíos continuos para el Banco Nacional Suizo.
El Banco Nacional Suizo ha declarado que intervendrá en el mercado de divisas si es necesario para mantener la inflación en la senda prevista. Sin embargo, hace dos semanas, Estados Unidos incluyó a Suiza en una lista de vigilancia de países sujetos a seguimiento por prácticas monetarias y comerciales desleales.



