El jueves, hora local, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) elevó ligeramente su pronóstico sobre el crecimiento de la demanda mundial de petróleo para este año, ya que el impacto de las políticas arancelarias de Estados Unidos en la economía mundial no fue tan grave como se anticipaba anteriormente, y los bajos precios del petróleo también impulsaron la demanda.
La AIE prevé actualmente que la demanda mundial de petróleo aumentará en 740.000 barriles diarios (bpd) en 2025, con una demanda total promedio de 104 millones de bpd, frente a un pronóstico anterior de un crecimiento de 726.000 bpd.
Un informe publicado por la OPEP el día anterior mostró que prevé que la demanda mundial de petróleo aumentará en 1,3 millones de bpd en 2025. La OPEP comenzó a aumentar gradualmente la producción en abril y, junto con los aumentos arancelarios de Trump, esto provocó una caída significativa en los precios mundiales del petróleo.
Durante las horas de negociación europea del jueves, los futuros del petróleo crudo WTI se desplomaron un 3,6% a 60,58 dólares por barril, mientras que el crudo Brent cayó un 3,7% a 63,66 dólares por barril. Esto se debió al optimismo del mercado sobre las perspectivas de un posible acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán, así como a un reciente aumento en los inventarios de petróleo crudo de Estados Unidos.
A principios de esta semana, las dos economías más grandes del mundo, China y Estados Unidos, anunciaron un acuerdo comercial y acordaron reducir mutuamente los aranceles, aliviando los temores de una recesión económica e impulsando a los precios del petróleo a repuntar desde los mínimos recientes. Sin embargo, las persistentes incertidumbres en torno a las futuras negociaciones comerciales han limitado aún más el espacio para subir.
En su informe mensual, la AIE reiteró su pronóstico de un importante superávit de suministro mundial de petróleo el próximo año, y prevé que el suministro mundial de petróleo aumentará en 1,6 millones de bpd en 2025 y 970.000 bpd en 2026. En su informe anterior del mes pasado, la agencia había pronosticado un crecimiento del suministro mundial de petróleo de 120.000 bpd y 960.000 bpd para este año y el próximo, respectivamente.
La AIE cree que el crecimiento del suministro de países no pertenecientes a la OPEP+ será robusto, y se espera que la producción diaria aumente en 1,3 millones de bpd este año, aunque se espera que aumente solo en 820.000 bpd el próximo año, ya que la producción de petróleo de esquisto de Estados Unidos se verá afectada por los bajos precios del petróleo. "La caída de los precios del petróleo ha llevado a algunos productores de petróleo de esquisto a reducir el gasto y los niveles de actividad, y se esperan más recortes de producción en los próximos trimestres", dijo la AIE.
Se espera que la OPEP+ aumente la producción diaria en 310.000 bpd en 2025 y otros 150.000 bpd en 2026. La alianza acordó aumentar el suministro de petróleo en 411.000 barriles diarios en junio, acelerando el ritmo de recuperación del suministro por segundo mes consecutivo, lo que genera preocupaciones sobre un posible exceso de oferta en los próximos meses.
No obstante, la AIE señaló que solo Arabia Saudita tiene la capacidad de aumentar considerablemente la producción. Mientras tanto, las sanciones más estrictas de Estados Unidos contra Venezuela e Irán pueden reducir la magnitud del exceso de oferta.
Los datos de la AIE muestran que, en abril, a pesar de la mayor presión de las sanciones, la producción de Irán se mantuvo fuerte, mientras que la de Venezuela fue la más afectada, con una caída de 130.000 barriles diarios respecto al mes anterior.



