Gwede Mantashe, el Ministro de Recursos Minerales y Energía de Sudáfrica, reveló que el gobierno está en conversaciones con productores de manganeso y cromo sobre cómo frenar la caída de la industria local. En las últimas décadas, más de la mitad de las 59 plantas de cromo del país han cerrado.
Mantashe declaró en la reunión de negociación del Sindicato de Metalúrgicos de Sudáfrica que la demanda de productos de aleación de estos dos metales aumentará, en parte debido al rápido crecimiento de tecnologías verdes como las baterías, pero también por el crecimiento en industrias tradicionales como la construcción.
Cree que a través del procesamiento doméstico de alto nivel, estos recursos pueden "impulsar un crecimiento económico inclusivo, la industrialización y el empleo sostenible."
"Sin embargo, enfrentamos una serie de desafíos que requieren acciones coordinadas de todas las partes."
"Nuestra industria de aleaciones alguna vez tuvo competitividad global y fue el orgullo de nuestra economía, pero ahora se enfrenta a numerosos desafíos, siendo la industria del cromo la más afectada."
"Actualmente, al menos 30 de los 59 hornos de cromo de nuestro país están en mantenimiento de parada, algunos de los cuales han sido completamente cerrados, lo que ha resultado en pérdida de empleos."
Mantashe reveló que un equipo ministerial compuesto por el Departamento de Comercio, Industria y Competitividad, el Departamento de Recursos Minerales y Energía, el Departamento de Transporte y el Tesoro Nacional se ha reunido para desarrollar urgentemente un plan de resurgimiento para la industria de fundición y garantizar su sostenibilidad a largo plazo.
Dijo que las tareas principales del equipo incluyen: revisar modelos de precios; mejorar la infraestructura ferroviaria y portuaria; incentivar la transformación local; y promover la modernización legislativa para empoderar al gobierno a intervenir cuando sea necesario.
Algunas políticas e incentivos discutidos con la industria incluyen: imponer impuestos a las exportaciones para limitar la exportación de minerales no procesados, y/o implementar cuotas para restringir la cantidad de mineral bruto exportado desde Sudáfrica.
Mantashe afirmó que el gobierno ha estado en consultas con inversores para traer capacidades de procesamiento, tecnología e industria a Sudáfrica, con el objetivo de avanzar en la industrialización del país.
Mantashe no mencionó la política del gobierno de EE. UU. para expandir las industrias mineras y de procesamiento nacionales. Recientemente, Trump firmó una orden ejecutiva para "expandir la producción mineral de EE. UU., simplificar aprobaciones y garantizar la seguridad nacional."
Los minerales críticos se utilizan ampliamente en la producción de aviones de combate, semiconductores, baterías de alta potencia y teléfonos inteligentes. La orden ejecutiva de Trump busca reducir la dependencia de fuentes extranjeras de minerales críticos.
Desde que Trump asumió el cargo, las tensiones entre EE. UU. y Sudáfrica han aumentado. En represalia contra EE. UU., Mantashe llamó a Sudáfrica y a los países africanos a suspender las exportaciones minerales a EE. UU.



