En 2025, el gobierno de Indonesia introdujo una serie de medidas regulatorias denominadas por la industria como las "nuevas políticas mineras". Estos paquetes de políticas no solo abordan aspectos centrales como los permisos de negocio minero, la aprobación de los planes de trabajo de los mineros y los sistemas tributarios, sino que también incluyen sanciones estrictas sin precedentes para las actividades mineras ilegales. Estas políticas e iniciativas significan un cambio fundamental en el paradigma de gobernanza minera de Indonesia. Esta transformación está redefiniendo los límites de las oportunidades y riesgos para las empresas mineras que operan en Indonesia.
- I. Reestructuración integral del sistema de políticas mineras de Indonesia
Las nuevas políticas mineras de Indonesia no son una política única, sino un proyecto sistemático que cubre toda la cadena industrial.
En febrero de 2025, el Congreso de Indonesia (Parlamento) aprobó formalmente una enmienda a la Ley de Minería de Minerales y Carbón, proporcionando un marco legal de alto nivel para las regulaciones específicas posteriores. El núcleo de esta enmienda radica en fortalecer el control estatal sobre los recursos minerales, con el objetivo de garantizar que la nación obtenga una mayor participación de los beneficios económicos de sus abundantes recursos naturales.
El Reglamento Gubernamental N.° 8, firmado por el presidente indonesio Prabowo el 17 de febrero de 2025 y vigente desde el 1 de marzo del mismo año, requiere que los exportadores de recursos naturales (incluidos, entre otros, los recursos minerales) depositen el 100 % de sus ingresos de exportación en cuentas bancarias indonesias designadas durante al menos 12 meses. Esta medida es significativamente más estricta que el requisito anterior de retención del 30 % durante tres meses. Su objetivo es aumentar la liquidez en dólares estadounidenses en Indonesia, estabilizar el tipo de cambio de la moneda indonesia y mejorar la resiliencia económica nacional.
En abril de 2025, el Reglamento Gubernamental N.° 19 de 2025, promulgado oficialmente y en vigor, ajustó sustancialmente la estructura de regalías mineras, introduciendo un sistema impositivo progresivo para productos básicos como el níquel, el cobre y el estaño. Para la industria del carbón, las nuevas tasas de regalía están vinculadas al precio de referencia del carbón indonesio y aplican una tarifa impositiva escalonada según el poder calorífico y el método de minería. Cuando el precio de referencia del carbón supera los 90 dólares por tonelada métrica, la tasa impositiva para algunos mineros aumenta un 1 % en comparación con la tasa original, con tasas impositivas para minas de carbón a cielo abierto que oscilan entre el 5 % y el 13,5 %. La importancia radica en que, mediante la introducción de un mecanismo de impuesto progresivo vinculado al precio, se busca incrementar los ingresos estatales y así fortalecer el control gubernamental sobre los recursos estratégicos, orientando las inversiones mineras hacia industrias descendentes de alto valor añadido.
El Reglamento Gubernamental N.° 39 de 2025, promulgado por el gobierno indonesio en septiembre de 2025 y en vigor desde el 1 de noviembre del mismo año, incluye dos partes: primero, el mecanismo de asignación de licencias. Este especifica dos mecanismos: subasta pública y concesión prioritaria. El alcance de la concesión prioritaria se amplía significativamente para incluir cooperativas, pequeñas y medianas empresas, entidades comerciales propiedad de organizaciones religiosas, empresas estatales/empresas regionales, empresas privadas que cooperen con universidades y empresas dedicadas a actividades descendentes. La intención es hacer que la distribución de los beneficios mineros sea más inclusiva y justa, fortalecer el papel de grupos específicos en la economía nacional y fomentar la colaboración industria-universidad-investigación. Segundo, los criterios de evaluación del valor de la inversión. El centro de la evaluación del valor de la inversión cambia de la dotación de recursos a la capacidad de procesamiento descendente y el cumplimiento ambiental. El plazo de la licencia de operación se extiende a 20 años (renovable dos veces, por 10 años cada vez); para actividades combinadas con procesamiento o refinación, el plazo puede ser de hasta 30 años. El objetivo es intercambiar estabilidad política a largo plazo por los compromisos de los inversores con instalaciones integradas descendentes y estándares ambientales más elevados, promoviendo la mejora industrial y el desarrollo sostenible.
El Reglamento N.° 17 de 2025, promulgado y en vigor por el Ministerio de Energía y Recursos Minerales de Indonesia el 3 de octubre de 2025, estipula que el sistema original de aprobación del plan de trabajo y presupuesto por tres años es reemplazado por un sistema de aprobación anual. Todos los mineros deben presentar el Plan de Trabajo y Presupuesto (RKAB) para el año siguiente entre el 1 de octubre y el 15 de noviembre de cada año, y el departamento de aprobación debe completar la aprobación en un plazo de 8 días hábiles; de lo contrario, el sistema lo considerará automáticamente aprobado. Este cambio otorga al gobierno una fuerte capacidad para regular dinámicamente la capacidad minera, particularmente el ritmo de suministro de productos clave como el carbón y el níquel. Esto marca un cambio fundamental en el sistema de aprobación presupuestaria para los mineros.
- II. Tendencias en la Aplicación de Cumplimiento y Judicialización en el Sector Minero de Indonesia
Una característica prominente de las nuevas políticas no son solo las normas en sí, sino también el fortalecimiento de la aplicación, convirtiéndose el cumplimiento ambiental en una prioridad en la aplicación de la ley.
En junio de 2025, en las islas Raja Ampat de la provincia de Papúa Occidental, Indonesia, los permisos de minería de cuatro empresas de extracción de níquel fueron revocados directamente por violar las normativas ambientales. Esta región es reconocida internacionalmente por su biodiversidad marina y valor científico. La decisión del gobierno señala claramente la mayor prioridad de la protección ambiental en el desarrollo minero, con sanciones para la minería ilegal que alcanzan niveles sin precedentes.
En septiembre de 2025, el Ministerio de Energía y Recursos Minerales de Indonesia anunció la suspensión de 190 permisos de negocio minero, lo que representa aproximadamente el 4% del total de permisos vigentes en Indonesia, involucrando diversos minerales como carbón, níquel, oro y estaño. Esta acción de aplicación a gran escala fue resultado directo de las violaciones de las empresas a las obligaciones de recuperación de tierras y a los cupos de producción, lo que indica el alto énfasis del gobierno en evaluar las responsabilidades de los mineros en la recuperación de tierras posteriores a la minería y problemas como exceder los cupos de extracción, implementándose las sanciones correspondientes.
En septiembre de 2025, la mina de níquel de Weda Bay, una de las minas de níquel más grandes del mundo operada conjuntamente por una empresa minera estatal indonesia y dos mineras extranjeras, tuvo su área operativa de 148 hectáreas tomada por un grupo de trabajo gubernamental debido a la sospecha de operaciones más allá del alcance permitido. Esta acción contra un gigante industrial demuestra claramente la aplicabilidad universal y la autoridad incuestionable de la nueva aplicación de políticas.
En diciembre de 2025, el Ministerio de Energía y Recursos Minerales de Indonesia emitió nuevas regulaciones que estipulan que los mineros que operen ilegalmente más allá de las áreas permitidas en bosques serán multados según un estándar de 354 millones a 6.500 millones de rupias indonesias por hectárea, enfrentando las empresas de minería de níquel las sanciones más altas. El monto de la multa se calcula no solo en base al área ocupada ilegalmente, sino también a la duración de las operaciones ilegales y la categoría de minerales, lo que indica que el gobierno indonesio está implementando un mecanismo de responsabilidad más refinado.
- III. Impacto Potencial de las Nuevas Políticas Mineras de Indonesia en el Mercado Minero Global
El cambio sistemático y integral en la política minera de Indonesia tendrá impactos que traspasarán sus fronteras, remodelando el panorama minero global desde tres aspectos: oferta del mercado, flujos de inversión y gobernanza global.
En primer lugar, el carácter "planificado" de la oferta del mercado intensifica la volatilidad de los precios. El impacto más directo proviene del cambio a un sistema anual de aprobación de los Planes y Presupuestos de Trabajo de los mineros (RKAB). Esto le da al gobierno indonesio una "válvula anual" para regular la oferta global de materias primas clave como níquel, estaño y carbón. Como el mayor proveedor mundial de níquel y un importante exportador de carbón, Indonesia puede ajustar activamente los objetivos de precios mediante el endurecimiento o la flexibilización de las cuotas de producción para salvaguardar los ingresos fiscales. Esta medida aumentará permanentemente la incertidumbre en el lado de la oferta; cualquier rumor sobre retrasos en las aprobaciones podría desencadenar fuertes fluctuaciones de precios. Para los fabricantes de productos intermedios (como empresas de baterías y acero inoxidable), la disminución de la estabilidad del suministro desde Indonesia los obligará a buscar la diversificación de la cadena de suministro o a aumentar los inventarios, incrementando así el costo general de la cadena industrial global.
En segundo lugar, la reestructuración de la lógica de inversión obliga al capital global a realizar elecciones estratégicas. Las nuevas políticas modifican forzosamente la fórmula de valor de inversión en la minería en Indonesia. Las ventajas inherentes de los recursos están cediendo paso a factores como las instalaciones de apoyo aguas abajo, el cumplimiento de criterios ESG y la contribución local. Esto significa que los proyectos mineros puros han perdido atractivo; el capital debe fluir hacia segmentos de valor agregado como la fundición y el procesamiento, al tiempo que cumple con estrictos estándares ambientales. Esto eleva significativamente la barrera de entrada, pudiendo conducir a una concentración de la inversión entre gigantes industriales capaces de manejar complejos desafíos de cumplimiento, mientras que los inversores pequeños y medianos o puramente financieros podrían verse forzados a salir. Simultáneamente, el endurecimiento de las políticas de Indonesia crea oportunidades de inversión alternativas para países ricos en recursos con regulaciones estables como Australia y Canadá, así como para productores de bauxita como Guinea, impulsando una reasignación del capital minero global.
En tercer lugar, el efecto derrame del paradigma de gobernanza establece un modelo para el nacionalismo de recursos "refinado". Como un país importante en minerales críticos, las prácticas políticas de Indonesia tienen un fuerte efecto demostrativo. Estos paquetes de políticas significan una mejora en las estrategias de control para los países ricos en recursos, pasando de la nacionalización o las prohibiciones de exportación a un conjunto de herramientas refinado que cubre factores fiscales, de licencias, cambiarios y ambientales. Este "modelo indonesio", destinado a maximizar los beneficios nacionales a largo plazo, probablemente será imitado por otros países en desarrollo ricos en recursos naturales, impulsando así regulaciones mineras globales más estrictas a mayor escala. Además, las nuevas políticas de Indonesia interactúan de manera compleja con la trazabilidad de la cadena de suministro y los estándares ESG de Estados Unidos y Europa (como la Ley de Reducción de la Inflación de EE. UU.), posicionándose como un punto focal en los juegos geo-económicos. Si su cadena de valor del níquel, basada en energía térmica, puede cumplir con los estándares "verdes" occidentales, impactará directamente la estructura y los costos de la cadena de suministro global de vehículos eléctricos.
En conclusión, las nuevas políticas mineras de Indonesia para 2025 representan una revolución profunda en la gobernanza minera, con el objetivo central de transformar las ventajas de los recursos en intereses nacionales maximizados y sostenibles mediante un control sistemático. Para el mercado global, esto no solo implica una menor elasticidad en el suministro de minerales críticos y mayores riesgos de volatilidad de precios, sino que también anuncia una reconfiguración fundamental de la lógica de inversión minera global.
Tenga en cuenta que esta noticia proviene del Instituto de Investigación Económica de Minería de Metales de China y fue traducida por SMM.
